Al acelerarse la transformación digital por el confinamiento de la crisis sanitaria, se preguntan empresas, colaboradores y profesionales como avanzar en el modelo del negocio digital, ya sea creciendo en “cultural ágil”, habilitando modelos de operación basados en datos o en la ejecución inteligente (aplicando inteligencia artificial de punta).

El modelo operativo basado en datos a partir del análisis y la arquitectura de datos, permite la hiper segmentación del mercado y la personalización de las actividades comerciales, es decir, entendiendo al cliente, tomando decisiones sobre el cliente, con datos en tiempo real del cliente y tomando decisiones sobre el negocio. El más exitoso modelo operativo basado en datos es el de Adobe, centrado en: diseño de experiencias, responsabilidad en la preservación de los datos y procesos basados en la trayectoria de leads y clientes.

Una cultura ágil tiene que construirse sobre una mentalidad ágil, de forma que las actuaciones se muevan más rápidamente, buscando que haya menos jerarquía en la toma de decisiones y que se entregue la responsabilidad a pequeños grupos y equipos ágiles para hacer que las cosas sucedan. Los canales de comunicación son entonces eficientes y abiertos, ya que hay más transparencia, es llevar SCRUM a diversos niveles del negocio, para un modelado ágil. El reto de la agilidad, con alto rendimiento y trabajo colaborativo.

La ejecución inteligente, como es el caso de aplicar el enfoque de la inteligencia ambiental (una de las formas de aplicar inteligencia artificial), dado por la convergencia de computación ubicua, comunicación ubicua y las interfaces que se adaptan al usuario; conectado sensores, actuadores y dispositivos en red, para adquirir y analizar datos de manera flexible en simultánea con la generación de acciones autónomas. El rol de las tecnologías digitales en la ejecución inteligente ha permitido ayudar a sobrevivir en medio de la crisis, acotar las fases de recuperación y disponer de plataformas digitales resistentes para los negocios.

Los modelos de negocios digitales pretenden afectar la velocidad de transformación de cada organización, para lo que es fundamental la mentalidad de los colaboradores (confianza, respeto, apertura, coraje, empatía), en estas épocas de crisis sanitaria, el principal activo de las organizaciones es su agilidad para transformarse mediante tecnologías digitales para acrecentar su capacidad de respuesta a mercados emergentes de consumidores signados por la pandemia.