La sociedad digital derivaría de la sociedad de la información y del conocimiento, como una sociedad donde las prácticas productivas y comunicativas se realizan fundamentalmente a través medios digitales. Las sociedades en la historia de la humanidad han concebido una identidad y un sentido asociado a la capacidad de modificar el entorno y a la capacidad de comunicarse, de trasmitir y difundir información, de aplicar y transferir conocimiento y de generar sabiduría; la tecnología ha permitido manejar la información, desde una sociedad primitiva con simple tecnología especializada de cazadores (con pocos artefactos) hasta una sociedad moderna con compleja tecnología (con muchos artefactos) para todas las especialidades. La sociedad de la información tiene una matriz tecnológica dinámica que suscita una transformación en la estructura social.
La sociedad del conocimiento depende de la continua interconexión, comunicación y procesamiento, transmisión de información de modo global e instantáneo, se potencia en la estructura y cimientos de la sociedad de la información para facilitar la intercomunicación humana, para aumentar la cooperación vertical y horizontal de organizaciones y comunidades, para evitar la homogeneidad cerrada de culturas e identidades colectivas o personales, para posibilitar repensar nuevas ideas, convicciones y creencias enriquecidas por otras culturas, perspectivas y sentidos.
Para la CEPAL, ”la economía digital está constituida por la infraestructura de telecomunicaciones, las industrias TIC (software, hardware y servicios TIC) y la red de actividades económicas y sociales facilitadas por Internet, la computación en la nube y las redes móviles, las sociales y de sensores remotos. (…) la economía digital es un facilitador cuyo desarrollo y despliegue se produce en un ecosistema caracterizado por la creciente y acelerada convergencia entre diversas tecnologías, que se concreta en redes de comunicación (redes y servicios, redes fijas-móviles), equipos de hardware (móviles multimedia 3G y 4G), servicios de procesamiento (computación en la nube) y tecnologías web (Web 2.0)”.
En Inglaterra por ejemplo bajo el marco de la economía digital se han impulsado empresas prosperas de servicios digitales para el mundo como: SwiftKey, TransferWise y Onefinestay. En chile La Agenda Digital 2020, es la estrategia de desarrollo digital de este país para el año 2020 con cinco ejes estratégicos: i) Derechos para el desarrollo digital; ii) Conectividad digital; iii) Gobierno Digital; iv) Economía Digital y; v) Competencias Digitales.
La Agenda Digital para América Latina y el Caribe (eLAC2018), establece cinco áreas de acción y 23 objetivos con el fin de aprovechar la revolución digital para aumentar y promover el acceso y la infraestructura, la economía digital, el gobierno electrónico, la gobernanza de la sociedad de la información, la inclusión social y el desarrollo sostenible. La hoja de ruta para impulsar la economía digital en Colombia, establece 11 características principales: conocimiento, digitalización, virtualización, nuevas dinámicas organizativas, integración, desintermediación, convergencia, innovación, inmediatez, globalización y discordancia.
La economía digital tiene que ver con transformación digital y con revolución digital, la economía creativa y la economía del conocimiento usan lo digital como un medio para gestarse y sostenerse.
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